Hassanna Aalia, de 26 años, fue condenado a cadena perpetua por un Tribunal Militar marroquí después de participar en 2010 en un campamento de protesta pacífica cerca de El Aaiún. Marruecos ordenó su búsqueda y Aalia solicitó asilo en Bilbao, donde se encontraba participando en un curso sobre derechos humanos. El Ministerio español le denegó esta petición y el joven recurrió la decisión ante la Audiencia Nacional. Este martes fue detenido en Burgos. Aalia está ya en libertad y sobre él pesa una orden de expulsión paralizada en estos momentos por la Audiencia Nacional. Hoy Hassanna Aalia ha acudido a la Cámara de Vitoria para reunirse con el Intergrupo Parlamentario Paz y Libertad para el Sahara Occidental. El Intergrupo, en una declaración aprobada por unanimidad, ha reclamado su asilo político.

La parlamentaria jeltzale, Jone Berriozabal, ha emplazado al Ministerio del Interior a reconocer el derecho de protección internacional que asiste a Hassanna Aalia. Si regresa a su país, ha manifestado Berriozabal, “será castigado duramente por las autoridades ocupantes marroquíes y no volverá a salir de prisión en lo que le queda de vida”. El grupo parlamentario EAJ-PNV defiende la lucha pacífica de este joven por el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui y reclama la protección de todos los derechos humanos. EAJ reitera su compromiso con todas aquellas iniciativas encaminadas a lograr la libertad de los saharauis.

Durante el encuentro celebrado con Aalia en el Parlamento Vasco, la representante jeltzale ha mostrado su preocupación por la vulneración de derechos humanos en el Sahara Occidental. Berriozabal ha pedido al Gobierno de Marruecos “que termine con la represión de este pueblo  y libere a todos los presos políticos saharauis”.