El Pleno del Parlamento Vasco ha respaldado la propuesta por EAJ-PNV, PSE-EE y EH Bildu para constituir una ponencia que acuerde las bases de la futura Ley de Educación que el Gobierno Vasco aprobará el próximo año. La Cámara Vasca acompañará así al Departamento de Educación en la labor de consensuar entre comunidad educativa, agentes, y partidos políticos la norma que definirá el modelo de escuela vasca de las próximas décadas. Se trata de una herramienta clave para nuestra sociedad, ha manifestado Leixuri Arrizabalaga,  que contará así con las aportaciones que pueda realizar este grupo de trabajo. “Nuestro objetivo como agentes políticos debe ser el de impulsar la creación de espacios para favorecer el acuerdo. Tenemos que ser capaces de definir un nuevo marco que sirva de guía para la educación de los próximos treinta años. Se lo debemos a la sociedad, a la comunidad educativa y a todos los agentes implicados. La educación es un gran reto de País y uno de los actores clave para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible”.

Durante su intervención, la parlamentaria jeltzale ha insistido en la importancia que tiene actualizar una ley que data de 1993 y que por lo tanto, no está preparada para afrontar los desafíos futuros y los cambios producidos a lo largo de estos 28 años. “Los profundos cambios sociales, económicos, pedagógicos y tecnológicos aconsejan plantear a la sociedad vasca y a la comunidad educativa una nueva Ley de Educación que dé respuesta a los retos de futuro, reconozca el papel de la escuela pública y garantice la igualdad de oportunidades en el aprendizaje”, ha apuntado. En este sentido, Arrizabalaga ha abogado por llevar al sistema educativo vasco a la excelencia y convertirlo en un referente europeo en calidad, equidad y modernidad.

La ponencia, cuya constitución ha recibido un amplio respaldo, recibirá las aportaciones de expertos, agentes sociales y representantes institucionales, entre otros. En una fase posterior, los grupos parlamentarios tratarán de alcanzar un acuerdo que será remitido al Departamento que dirige Jokin Bildarratz para que lo analice y tome como base de la futura Ley de Educación. “Es importante abrir un nuevo tiempo en el proceso de construcción del futuro sistema educativo. Un sistema que nazca fruto del consenso y perdure en el tiempo”, ha apuntado.