En una entrevista concedida a Euskadi Irratia, el Presidente del GBB, Joseba Egibar, ha señalado que los sucesos de estos últimos días “no ofrecen una buena fotografía”. Ha explicado que, “en quince días, hemos vivido dos acontecimientos lamentables: las muertes de Angulo y de Sainz. Lo sucedido es un ejemplo de las consecuencias que produce la política penitenciaria del Gobierno español y ahí radica la gravedad de estos sucesos”.

 

En opinión del portavoz parlamentario de EAJ-PNV, últimamente, el Gobierno español ha ido muy lejos al aceptar algunas resoluciones de la Audiencia Nacional. Así, “la reunificación de penas resulta inaceptable. Y aunque el Gobierno español no ha promovido esa resolución, sí la protege. Sin lugar a dudas, la llave y la responsabilidad de la política penitenciaria y de sus consecuencias la tiene el Gobierno de Zapatero” ha agregado. También se ha cuestionado si la izquierda abertzale, de verdad, cree que el PNV es el culpable de que hayan muerto los dos presos; ha concluido que si la izquierda abertzale no es capaz de distinguir, los próximos análisis que haga también estarán condicionados.

 

Egibar ha subrayado que, “curiosamente” el principal responsable de la política penitenciaria –el PSOE- se ha quedado fuera de la disputa. “Ante la fotografía del enfrentamiento entre abertzales, el Partido Socialista ve claro el panorama y piensa ‘vaya chollo. Mientras estos sigan así, nosotros podemos estar tranquilos. En esas andan los socialistas” ha remarcado.

 

Por otra parte, en relación con la constitución de la mesa de partidos, Egibar considera que no se le puede responsabilizar de todo a la izquierda abertzale. Ha señalado que “si ETA abre las puertas a la negociación y al diálogo con el Gobierno español, está claro que la izquierda abertzale algún esfuerzo ha hecho”; y ha matizado que “parece que si ETA no anuncia un alto el fuego en las próximas semanas todo se irá al garete”.  El burukide jeltzale ha indicado que “está claro que tiene que crearse el ambiente propicio para que pueda constituirse una auténtica mesa de partidos. Pero,¿eso supone que van a desaparecer todas las conculcaciones de derechos? Creo que no. ¿Se van a acabar las consecuencias de la política penitenciaria o la amenaza del llamado ‘impuesto revolucionario’? o, por el contrario, ¿para solucionar todo esto hay que constituir la mesa?”. Considera que se constituirá cuando haya suficiente “cocina” y que, para, eso deberá estar fijada su función.