El Parlamento Vasco ha aprobado esta mañana el informe de la ponencia para el estudio de la descarbonización de la Comunidad Autónoma de Euskadi. Un documento que recoge las líneas maestras que servirán para liderar distintas estrategias frente al cambio climático y transitar hacia un modelo energético más sostenible. La elaboración del informe ha contado con la colaboración de un gran número de agentes sociales, medioambientales y económicos durante los últimos meses y, de hecho, subraya la necesidad de realizar un “esfuerzo compartido entre todos los actores institucionales, sociales y económicos” para lograr las transformaciones necesarias.

 “Este no es un texto científico o técnico. Se trata de un texto político, una aportación realizada desde la humildad, pero que puede ser un hito en este reto climático al que nos enfrentamos”, ha afirmado esta mañana el parlamentario de EAJ-PNV Unai Grajales en el Pleno celebrado en la Cámara de Gasteiz. El parlamentario jeltzale también ha aplaudido el trabajo conjunto realizado en el seno de la Cámara de Gasteiz. “Hemos vuelto a demostrar que, cuando hay voluntad, existe margen para el acuerdo. Tanto la consejera Tapia como el Lehendakari como yo mismo hemos explicado en más de una ocasión que necesitamos un acuerdo de país sobre la energía. Hoy damos un nuevo paso en esa dirección. Intentemos hacer lo propio de cara a aprobar la Ley de Transición Energética y el Cambio Climático”, ha afirmado Grajales.

El documento aprobado hoy recuerda que el cambio climático es un desafío urgente y certifica el compromiso de Euskadi con la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero y la descarbonización de la economía. El Gobierno Vasco y el Parlamento, de hecho, declararon la emergencia climática en el año 2019, y el trabajo en la Cámara de Gasteiz para la aprobación de este informe también refleja este firme compromiso con el medio ambiente y el futuro. “El reto es muy grande, pero también es realizable”, ha afirmado el parlamentario de EAJ-PNV.

Para lograr los objetivos deseados (en un proceso que será largo y complejo) se plantean distintos retos y ámbitos de actuación: el medioambiental, el tecnológico e industrial, el de la gobernanza. También se han identificado oportunidades para la descarbonización. “Euskadi está especialmente bien posicionada”, ha destacado Unai Grajales.

De la misma forma, el informe fija posibles medidas para los distintos sectores como son el energético, el de la industria, el transporte, el sector residencial y otros (primer sector, residuos…). Y es que la transición energética a un modelo basado en energías renovables, dejando atrás los combustibles fósiles, se debe acometer desde todos los ámbitos y de forma conjunta. “Es imprescindible y urgente actuar. Cuanto antes lo hagamos, mayores serán los beneficios económicos, sociales y medioambiantales”, ha advertido Unai Grajales.

El documento que hoy ha recibido el visto bueno de una importante mayoría parlamentaria ha apuntado a la necesidad de realizar un esfuerzo compartido entre instituciones, sector privado y la propia ciudadanía. “Este cambio de modelo traerá beneficios: mejoraremos la competitividad de nuestras empresas, reduciremos la dependencia energética, crearemos nuevos nichos de empleo y obtendremos un mayor aprovechamiento de los residuos. Dejaremos un planeta mejor a las próximas generaciones”.